26/7/07

Antonio Machado

Moneda que está en la mano,
tal vez se deba guardar.
La monedita del alma
se pierde si no se da.
Un 26 de Xullo de 1875 Naceu en Sevilla Antonio Cipriano José Maria y Francisco de Santa Ana Machado Ruíz, coñecido como Antonio Machado. Por esta razón acordeime de Oki, que como todos sabedes é unha gran entusiata deste poeta e pensei que era unha boa disculpa para ler algúns poemas do mesmo. Que todos o disfrutedes e sobre todo para Oki. Non vos esquezades de navegar por este enlace que vos envío, descubriredes a relación de Machado con Galicia:
http://www.abelmartin.com/guia/antol/antol.html
Visitade tamén:
http://www.antoniomachadoensoria.com/ (Marabillosa páxina sobre Machado en Soria)
RETRATO
Mi infancia son recuerdos de un patio de Sevilla,
y un huerto claro donde madura el limonero;
mi juventud, veinte años en tierra de Castilla;
mi historia, algunos casos que recordar no quiero.
Ni un seductor Mañara , ni un Bradomín he sido
-ya conocéis mi torpe aliño indumentario-,
as recibí la flecha que me asignó Cupido,
y amé cuanto ellas puedan tener de hospitalario.
Hay en mis venas gotas de sangre jacobina,
pero mi verso brota de manantial sereno;
y, más que un hombre al uso que sabe su doctrina,
soy, en el buen sentido de la palabra, bueno.
Adoro la hermosura, y en la moderna estética
corté las viejas rosas del huerto de Ronsard;
mas no amo los afeites de la actual cosmética,
ni soy un ave de esas del nuevo gay-trinar.
Desdeño las romanzas de los tenores huecos
y el coro de los grillos que cantan a la luna.
A distinguir me paro las voces de los ecos,
y escucho solamente, entre las voces, una.
¿Soy clásico o romántico? No sé. Dejar quisiera
mi verso, como deja el capitán su espada:
famosa por la mano viril que la blandiera,
no por el docto oficio del forjador preciada.
Converso con el hombre que siempre va conmigo
-quien habla solo espera hablar a Dios un día-;
mi soliloquio es plática con ese buen amigo
que me enseñó el secreto de la filantropía.
Y al cabo, nada os debo; debéisme cuanto he escrito.
A mi trabajo acudo, con mi dinero pago
el traje que me cubre y la masión que habito,
el pan que me alimenta y el lecho en donde yago.
Y cuando llegue el día del último viaje,
y esté al partir la nave que nunca ha de tornar,
me encontraréis a bordo ligero de equipage,
casi desnudo, como los hijos de la mar.
Antonio Machado

No hay comentarios: